Se interrumpe tendencia a la baja en el ganado gordo

Se aprecia una estabilidad en los valores del mercado ganadero.

En la reunión de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) se estableció en el comentario que “con entradas ágiles y escasa oferta se interrumpe la tendencia a la baja”.

El novillo gordo el kilo en pie y a la carne se mantuvo sin cambios, U$S 2,12 y U$S 3,89, respectivamente. La vaca gorda, en pie y a la carne también se mantuvo en U$S 1,75 y U$S 3,66. En el caso de las vaquillonas, el kilo en pie cotiza en U$S 2,09, sin variaciones; pero a la carne subió un centavo a U$S 3,82.

En cuanto a los ovinos, el “mercado está firme, con entradas cortas”. Los corderos U$S 4,02 (+2 centavos); borregos U$S 4,02 (+2 centavos); capones U$S 3,34; ovejas U$S 3,19 (+3 centavos).

Por su parte, el comentario para la reposición establece que la oferta “continúa reducida y demanda que actúa con cautela. Variabilidad en los valores según el tipo y clase de ganado”.

El ternero subió a U$S 2,63 (+2 centavos); la ternera bajó a U$S 2,14 (-3 centavos); y la vaca de invernada cotiza a U$S 1,59 (-1 centavo).

Estabilidad

En un contexto de estabilidad en los valores del mercado ganadero, Joaquín Falcón, presidente de la Asociación de Consignatarios de Ganado, expresó que el mismo sigue marcando una estabilidad en los valores, aunque persiste una baja oferta de ganado bien terminado. Señaló a El País que muchos productores están en posición de aumentar el peso de sus animales, esperando aprovechar la primavera que ha comenzado de manera favorable.

La industria se enfrenta a una oferta limitada, con entradas cortas y una demanda ávida por todas las categorías de ganado. Sin embargo, Falcón destacó la disparidad de precios entre las distintas plantas procesadoras, con diferencias que oscilan entre los 15 y 20 centavos en algunas categorías. “El abasto sigue firme, con una mayor demanda en la categoría de vaquillonas”, explicó, aunque subrayó que el mercado en general se mantiene estable y con precios tendiendo al equilibrio.

En cuanto a la reposición, Falcón indicó que hay una oferta escasa y pocas concreciones de negocios. “Quienes tienen ganado para vender, están buscando meter los kilos al costo más bajo posible durante el año”, agregó. A pesar de esto, la demanda se mantiene activa, pero cautelosa, dependiendo de las categorías de ganado. Los corrales continúan operando firmemente, lo que también genera diferencias de precios, especialmente en la categoría de novillos, cuyos valores varían desde U$S 1,85 hasta U$S 2,10 dólares por kilo, dependiendo de si los novillos son aptos o no para corrales.

Falcón concluyó que el mercado sigue siendo ágil y dinámico, con una clara preferencia por ganado de alta calidad. Esto se refleja particularmente en el caso de los ganados preñados, donde también se observa una disparidad de precios de hasta 150 dólares, en función de las pariciones y la calidad de los animales.