En una jornada electoral marcada por el calor agobiante y la intensa competencia entre los candidatos Álvaro Delgado, de la Coalición Republicana, y Yamandú Orsi, del Frente Amplio, que finalmente terminó con el triunfo de la fórmula del Frente Amplio, Paysandú vivió un día de votación lleno de contrastes, pero con una constante: el sol abrasador que acompañó a los votantes durante todo el proceso. La ciudad, como gran parte del país, se preparó para un día decisivo, en el que el destino de la política nacional podría tomar un giro importante.
Desde las primeras horas del día, Paysandú se encontraba en movimiento. La calle 18 de Julio, arteria principal de la ciudad, vibraba con el paso de los vehículos y las personas, algunas con banderas del Frente Amplio o del Partido Nacional, otras transportando votantes a los centros de votación en autos identificados con símbolos partidarios. La jornada, sin embargo, no sólo era política; el calor implacable de la tarde de noviembre convirtió cada paso en un esfuerzo, cada fila en una prueba de resistencia.
En el Espacio Gobbi votaron personas de edad media y más grandes. Con dos circuitos y con “cuartos oscuros” en la parte del escenario, fueron pasando los habilitados a sufragar que, temprano en la mañana, eran bastantes.
El ambiente también era animado en otros centros de la ciudad, como el salón comunal de la cooperativa Covisan, en la zona de Instrucciones del Año XIII y Vizconde de Mauá. La fila de votantes que salía del local era larga, y muchos se resguardaban del sol bajo el alero de la cooperativa. Se habían dispuesto sillas fuera del centro para ofrecer descanso a los mayores, quienes mostraban su deseo de votar temprano, aun sabiendo que el sol ya calentaba fuerte desde la mañana.
A las 7:10 de la mañana, el Paysandú Golf Club, ubicado en las afueras de la ciudad, ya tenía a votantes esperando en fila. El centro, que dispuso de dos circuitos en el espacio amplio de la ranchada, empezó a registrar a las primeras personas habilitadas, unas 300 por circuito. “El calor es el principal factor que nos trae a votar temprano, para evitar el malestar de la tarde”, comentaba uno de los delegados de mesa.
Mientras tanto, en el liceo N.° 1, la situación no resultaba ser diferente. Los primeros votantes llegaron antes de las 8, y la fila era larga. A lo largo de la mañana, el sol continuó aumentando su intensidad, convirtiéndose en un desafío adicional para los votantes, especialmente los mayores. “A la gente mayor le gusta venir temprano, pero este calor es un sufrimiento”, decía una delegada.
A medida que avanzaba el día, la actividad en los circuitos seguía su curso, aunque con menos frecuencia durante las horas más calientes, entre las 14 y las 17. Entre esas horas, el “calor estuvo salado”, comentó otro delegado. El termómetro trepó hasta los 35º en la ciudad a las 16.25, de acuerdo al registro de la estación automática MSur de EL TELEGRAFO, ubicada en nuestra planta de impresión de Dr. Roldán y Purificación, e incluso estuvo por encima de los 33ºC entre las 13 y las 18.30.
En tanto en el vecino liceo 5, la votación transcurrió normal, con una fuerte afluencia entre las 8 y 9, luego mermó hasta las 10.30, y desde ahí hasta el mediodía volvió a moverse fuerte en sus cuatro circuitos. → Leer más