El estadounidense Will Smith, el puertorriqueño Nicky Jam y la albanesa Era Istrefi interpretaron el himno oficial de la Copa del Mundo, “Live It Up”, en lo que fuera la ceremonia de clausura del Mundial de Rusia, previo a la disputa de la gran final.
Aunque el momento que más aplaudió el público se produjo justo después, cuando el legendario Ronaldinho apareció en la cancha para acompañar con un tambor tipo yembe la tradicional canción rusa “Kalinka”.
La ceremonia de clausura fue corta, al igual que la de apertura.
Sobre una lona azul que cubría todo el terreno de juego, con un gran escenario central dorado, un numeroso grupo de bailarines con llamativas ropas de colores con las banderas de los 32 países participantes y unos malabaristas del balón enseñaron sus habilidades con la pelota, mientras se mostraban por unas pantallas algunas de las mejores acciones del Mundial.
A la vez, en las gradas se desplegaban enormes lonas con imágenes de los ocho seleccionados que llegaron al tramo final de la competencia, Uruguay incluido.
Y, como era de esperar, no faltaron los fuegos artificiales.
Partido y después
Finalizó el partido, y rápidamente se montó el escenario para realizar la entrega de premios. Con los presidentes de Rusia, Francia y Croacia acompañando al de FIFA, Gianni Infantino, la ceremonia de premiación terminó con lluvia, lo que igualmente no opacó el festejo de los franceses.
Previo a la entrega del trofeo, FIFA entregó los premios otorgados por el Grupo de Estudios Técnicos.
El Balón de Oro a mejor jugador fue para el croata Luka Modric; el Guante de Oro fue entregado al arquero belga Thibaut Courtois; el francés Kylian Mbappé fue premiado como mejor jugador joven, con solo 19 años, minutos después de haber marcado un gol en la finalísima; el Balón de Plata fue para el belga Eden Hazard, mientras que el Balón de Bronce fue entregado al francés Antoine Griezmann.
Goles y Fair Play
El goleador del Mundial, que se llevó la Bota de Oro, fue el inglés Harry Kane, que marcó seis goles a lo largo de la cita.
Y el belga Romelu Lukaku, con 4 dianas, obtuvo la Bota de Bronce.
En cuanto al Premio Fair Play de la FIFA, fue para España. Pese a que la Furia Roja tuvo un mal desempeño en el Mundial, estando lejos de lo que se esperaba y quedando eliminado en octavos de final, al menos fue el seleccionado que tuvo mejor comportamiento en el campo de juego.
A los dirigidos por Fernando Hierro solo le mostraron dos amarillas en los cuatro partidos disputados, y cometió solo 34 faltas.
Catar 2002
Rusia 2018 entregó la posta a Catar 2022, que recibirá la cita mundialista desde el 21 de noviembre al 18 de diciembre de ese año, y que podría sumar más selecciones, lo que todavía está a definir.
