El segundo entrenamiento uruguayo en suelo ruso se inició ayer con lluvia intermitente y frío en el complejo Gorsky Sport Centre, ubicado a unos 20 kilómetros del centro de Nizhny Nóvgorod, pero con la tranquilidad del entrenador Oscar Tabárez de tener a todo el plantel en el campo a tres días de enfrentar a Egipto en Ekaterimburgo.
Lucas Torreira y Rodrigo Bentancur, quienes quedaron sentidos luego del movimiento del lunes, se entrenaron con normalidad, superando sus molestias físicas y estarán disponibles para medirse con los egipcios el próximo viernes (a las 9 de nuestro país), en el debut por el Grupo A de la Copa del Mundo.
La segunda sesión de trabajo del conjunto celeste prolongó las buenas noticias de Uruguay, que el día anterior pudo trabajar con Guillermo Varela por primera vez después de perderse por una contractura el encuentro amistoso que ganó Uruguay por 3-0 ante Uzbekistán en Montevideo. Ayer, Varela, que seguramente ocupará un hueco en el lateral derecho de Uruguay contra Egipto, volvió a ejercitarse a las órdenes de Tabárez.
De su lado, Bentancur se vislumbra como titular en la mitad de la cancha, mientras que Torreira es uno de los aspirantes a sacarle el puesto a Nahitan Nandez, a Matías Vecino o a Giorgean de Arrascaeta. Los tres, junto a Bentancur, tienen muchas opciones de formar parte de la zona media, salvo que Tabárez sorprenda con Torreira o con el “Cebolla” Rodríguez en el lugar de Nandez.
Uruguay, de momento, se prepara en dobles sesiones matinales y vespertinas y, ayer por la mañana inició el entrenamiento en el gimnasio a las órdenes del preparador físico José Herrera. Después, culminaron la mañana de trabajo con ejercicios en una de las canchas de entrenamiento del Borsky en los que predominaron ejercicios en espacios reducidos y remates al arco.
Esta práctica estuvo abierta a la prensa durante los primeros 15 minutos. Tres equipos rotaron para jugar con pelota en tiempos de tres minutos donde primó la intensidad. Luis Suárez se dio el gusto de improvisar una media vuelta que pasó cerca del arco, mientras los demás jugadores priorizaron controlar el balón y pasarlo con precisión a sus compañeros.
Por la tarde, Uruguay volvió al campo completando una exigente jornada de entrenamientos que tuvo su momento más divertido durante la conferencia de prensa de De Arrascaeta y Nandez, a las carcajadas debido a un tropezón del sonidista de la sala.
LA MÍSTICA
“Nunca nos caracterizamos por ser favoritos, la mística nuestra siempre es ser humilde e ir partido a partido”, lanzó De Arrascaeta en esa rueda de prensa, una vez culminados los entrenamientos. El mediocampista de Cruzeiro es una de las figuras jóvenes del plantel y estaría dentro de la oncena titular el viernes.
“Estamos trabajando firme y confiamos en llegar a nuestros objetivos, iremos partido a partido y veremos hasta dónde podemos llegar”, concluyó el jugador.
Nandez, el otro que habló ayer con los periodistas, reconoció que transita momentos de ansiedad por participar en su primera Copa del Mundo. Sin embargo, disfruta de cada momento junto a los referentes del equipo. Suárez “es uno de los pilares fundamentales para nuestro equipo y nuestro juego”, dijo el volante de Boca Juniors que lucha por un lugar en los 11 de arranque.
“En el fútbol, en tan poco tiempo, pasan cosas tan rápidas que cuando uno se pone a pensar, ya pasaron. Hay que tratar de disfrutarlas, la oportunidad de jugar un Mundial no se da todos los días…”, continuó. “Tenemos que preocuparnos por nosotros, por hacer bien nuestro trabajo y después tratar de limitar los fuertes que puedan tener los otros equipos”, finzalizó el exjugador de Peñarol.
AMISTOSO ANTE MÉXICO
Uruguay enfrentará el próximo 7 de setiembre en Houston a México, en partido amistoso confirmado ayer. Estas dos selecciones se han enfrentado 20 veces con ocho victorias para México, cinco para los uruguayos y siete empates, aunque el partido más importante lo ganó la celeste en el Mundial de Sudáfrica 2010 en la que superó al Tri en la fase de grupos (1-0 con gol de Suárez) y así evitó al favorito Argentina en octavos de final.
Los dos equipos se enfrentaron por última vez en junio de 2016 en Arizona en la Copa América Centenario con triunfo de México por 3-1. El choque forma parte de la gira anual de los aztecas por Estados Unidos que empezó en 2002 y promedia unos 50.000 aficionados por cada partido; la mayoría son mexicanos que viven en ese país.
