Proyecto Iberá: La vuelta del guacamayo rojo

En el estero de Iberá, Provincia de Corrientes, se está desarrollando un proyecto de características descomunales, consistente en la recuperación del ecosistema de esa región a través de la reintroducción de especies autóctonas amenazadas de extinción por el cambio de su hábitat y la persistente depredación humana.
Financiado por la Fundación Tompkins y la Conservation Land Trust, el objetivo final es crear en esa zona un Parque Nacional que sirva para consolidar una economía local basada en el ecoturismo y la naturaleza. A tales efectos se han estado reinstaurando animales como el oso hormiguero gigante, el venado de campo, el pecarí, el tapir, el guacamayo rojo, y se está en miras de liberar algunos ejemplares de yaguareté.

Ponerlos en territorio no es tarea fácil. Primero deben pasar por un proceso de adaptación o reeducación de sus habilidades perdidas, que puede insumir de uno hasta dos años de duración, y que se realiza en condiciones de cautiverio.
En el caso del guacamayo rojo –el popular “papagayo”–, se trata de una especie que se tiene como mascota en las casas y que dada su longevidad –su vida promedio está en el entorno de los 75 años– muchas veces están en manos de propietarios que no las han adquirido sino heredado, y que prefieren donarlas a grupos conservacionistas. Cuando esto sucede, ya el guacamayo ha pasado gran parte de su existencia sin practicar el vuelo –debido a que se le cortan las plumas para que no escape de la casa donde vive– y los músculos se le han atrofiado por inmovilidad. La reeducación en estos casos, consiste en mantenerlos en grandes jaulones donde puedan volver a tomar contacto con la práctica del vuelo, y donde puedan vincularse con otros de su misma especie y conseguir pareja y reproducirse.

Con el propósito de colaborar con la tarea de recuperación ecosistémica que se desarrolla en el norte de Argentina, el colectivo uruguayo Coendú (Conservación de Especies Nativas del Uruguay) se ha propuesto enviar guacamayos rojos que les sean donados por sus actuales dueños, a los administradores del Proyecto Iberá. Ya tienen bajo su custodia dos aves de esta especie y la idea es que el número crezca a través del conocimiento público de lo que han denominado “Operación regreso”, un plan que intenta rescatar de los hogares uruguayos, los guacamayos rojos que existan y que sus dueños prefieran dejar en libertad. Para ello, Mauricio Álvarez –referente de Coendú– está recorriendo el país dando a conocer esta operación y realizando conferencias didácticas sobre el guacamayo, sus características físicas y su estilo de vida. La primera de esas charlas la dio en Montevideo. Luego pasó por Maldonado y Salto, y en su parada sanducera expuso durante casi una hora en la sala “1° de Julio” de EL TELEGRAFO.