(EL PAIS)
San Javier palpita el partido entre Rusia y Uruguay, mientras se viste de fiesta para recibir a tantos visitantes como el número de habitantes que tiene el pueblo.
Desde temprano varias casas lucieron con banderas de los dos países y fueron varios los que decidieron participar del concurso de fachadas. “Cielo de un solo color”, como dice la canción oficial celeste con la traducción en ruso, se leyó en una de las casas. En otra, dos barcos pintados y varios apellidos, simbolizaron la llegada de los fundadores.
La comisión local de Turismo hizo lo propio, dando el colorido ideal a las avenidas. Además, bailes tradicionales, matrioshkas, vestimentas y comidas típicas formaron parte de una feria que se montó sobre plaza Libertad, acondicionada para tal fin, donde este lunes habrá una pantalla gigante que desafiará al frío del invierno, para que locales y visitantes disfruten de la cita mundialista. El grupo folclórico local, Nepomuceno Terra, el de bailes clásicos Kalinka y la banda municipal con canciones rusas, pusieron el marco ideal a la jornada.
Al menos ocho excursiones con estudiantes de Salto, Tacuarembó, Paysandú, Young y Colonia, llegarán para presenciar el partido y conocer más acerca de la cultura rusa, que vienen estudiando a partir del mundial.