Pese a creciente ola inmigratoria, ciudadanos extranjeros tienen muy poca incidencia en padrón electoral de Uruguay

En los últimos años se observa un incremento del fenómeno inmigratorio en Uruguay, sobre todo por el ingreso de personas desde países con llegada poco habitual al país, como venezolanos, cubanos, colombianos y países centroamericanos, que se nota particularmente en Montevideo y en mucho menor grado en ciudades del Interior. A pesar de ello, el otorgamiento de ciudadanía legal es de escasa incidencia en la población uruguaya y menos aún eventualmente en el registro para participar en las elecciones. Esta información se desprende del informe elaborado por la asesoría del diputado sanducero doctor Nicolás Olivera, al que ha tenido acceso EL TELEGRAFO.
Estos datos desmienten especulaciones y audios de supuestos diálogos que se han divulgado por redes sociales con respecto a que se trataría de una maniobra orquestada para contar con un respaldo electoral extra por la fuerza de gobierno en la próxima elección. Los números indican que no solo se trata de un aporte ínfimo sino que, en el mejor de los casos, la ciudadanía legal se obtendría recién a partir de 2024, para quien la solicite luego de haber ingresado este año.
La creciente ola inmigratoria que se registra en el Uruguay en los últimos años ha provocado inquietud en algunos sectores sobre si tiene como consecuencia una ola paralela y de magnitud similar en los trámites ante la Corte Electoral para la solicitud de la ciudadanía legal. Eso, precisamente, es analizado en este informe.

MENOS DE 500 EN 2018

Con base en datos de la sección Ciudadanía Legal de la Corte Electoral, se desprende que la cantidad de trámites de ciudadanía legal aprobados en lo que va de 2018 permite proyectar una cifra que rondará el otorgamiento de unas 475 cartas de ciudadanía.
La información revela tres períodos: 1) 2006-2010: Se otorgaron 776 cartas de ciudadanía, con un promedio anual en el entorno de 150. 2) 2011-2015: Se otorgaron 1.491 cartas, con promedio anual de unas 300. 3) 2016-abril de 2018: Se otorgaron 1.178 cartas de ciudadanía en 28 meses, lo que significa unas 500 expediciones por año. Para tramitar la carta de ciudadanía, los extranjeros deben contar con tres años de residencia habitual en el país como mínimo si tienen familia constituida, o cinco años, por lo menos, en caso de no tenerla.
Con esa referencia, el primer escalón de aumento de la cantidad de cartas de ciudadanía expedidas anualmente, que se constituye del período 2006-2010 al 2011-2015, se corresponde con el aumento de las residencias otorgadas a emigrantes a partir de 2008.
Las residencias otorgadas por la Dirección Nacional de Migraciones pasan de un promedio anual de 1.300 en los años anteriores a un promedio anual de 3.900 en 2008 y 2009. A partir de ese momento, comenzó a registrarse el efecto del crecimiento económico como factor atrayente y la aprobación de la Ley de Refugiados N° 18.076, de 19 de diciembre de 2006, y de la Ley de Migraciones N° 18.250, de 6 de enero de 2008, como factor facilitador de la inmigración.
El segundo escalón de incremento de la cantidad de cartas de ciudadanía otorgadas anualmente se observa al pasar del período 2011-2015 al período 2016-2018. Este se corresponde con la ola inmigratoria registrada desde 2014, con un promedio anual de residencias otorgadas a inmigrantes en torno a las 10.000. En los últimos años, están presentes los efectos de la Ley N° 19.254 de 28 de agosto de 2014, que otorgó al Ministerio de Relaciones Exteriores la competencia de expedir la residencia a los extranjeros cónyuges, concubinos, padres, hermanos y nietos de uruguayos, y a los nacionales de los Estados parte y Estados asociados al Mercosur.

MENOS CIUDADANÍAS QUE RESIDENCIAS

Si bien el aumento de cartas de ciudadanía expedidas ha acompañado la tendencia al crecimiento de la inmigración y esta tendencia continuará en los próximos años, según las proyecciones, las cifras analizadas indican una tasa de crecimiento menor en las solicitudes de trámites por ciudadanía legal, en comparación con el incremento de las residencias expedidas. En números absolutos, las cartas de ciudadanía otorgadas anualmente siguen siendo una cantidad baja.
Aquellos extranjeros que están ingresando hoy –mayo de 2018– al país y obtienen la residencia, recién podrán solicitar la carta de ciudadanía en 2021 si tienen familia constituida o en 2023 si no la tienen. Y luego de obtenida la carta de ciudadanía, recién podrán inscribirse en el Registro Cívico Nacional tres años más tarde. Entonces, no alcanzan a integrar el padrón de habilitados para la Elección Nacional de 2024.
En 2017, la DNM recibió solicitudes de residencia de 968 cubanos, 264 dominicanos, 135 alemanes y 89 franceses. Las residencias otorgadas por la Dirección General de Asuntos Consulares y Vinculación en 2017 tuvieron como destinatarios personas de las siguientes nacionalidades: 3.271 venezolanos, 2.225 argentinos, 1.866 brasileros, 485 colombianos, 408 peruanos, 97 ecuatorianos y 454 del resto del mundo (para poder hacer el trámite por la Dirección General de Asuntos Consulares y Vinculación deben ser familiares de uruguayos). Ese mismo año, se quebró una tendencia histórica: por primera vez, son más los inmigrantes venezolanos que argentinos los que solicitan residencia en el país.