Dodge GTX de 1973

En oportunidad de llevarse a cabo el desfile de automóviles en el marco de la Fiesta de la Prensa de EL TELEGRAFO, participó un auto Dodge GTX de 1973.
Pertenece a Ricardo Zuzunegui, residente en Concepción del Uruguay, provincia de Entre Ríos. Esta versión coupé deportiva del Dodge luce excelentemente presentada, pintada de color naranja e impulsada por el potente motor V8 Mopar LA318 de 5.2 litros original, pero algo “envenenado”.
UN POCO DE HISTORIA
El Dodge GTX fue –o si se quiere es–, un automóvil de turismo del segmento D, fabricado por la filial argentina de la compañía estadounidense Chrysler para su marca Dodge. El mismo correspondía a un desarrollo realizado sobre la base de la cuarta generación del modelo Dodge Dart, consistente en una cupé sin parantes, de corte deportivo, diseño aerodinámico y que era capaz de brindar altas prestaciones. Por su diseño fue catalogado como uno de los pocos autos de ese tipo con fabricación argentina.
Este automóvil fue presentado en octubre del año 1970, como reemplazo del modelo Dodge GT de la gama sedán de la línea de autos. Resultó a la vez la piedra fundamental que diera lugar a la gama cupé de esta línea de autos, de la cual surgirían con posterioridad la versión cupé del Polara y su versión evolucionada AT.
El auto fue presentado originalmente equipado con un impulsor de 6 cilindros en línea, que fuera utilizado originalmente en el sedán Dodge GT acoplado a una caja manual de 4 velocidades.
Tiempo más tarde este motor fue suplantado por un V8 de 318 pulgadas cúbicas de origen mexicano, el cual terminaría de convertirse en distintivo para este modelo, hasta el final de su producción en el año 1978.
Este modelo fue utilizado en Argentina para competir por aquellos años en la categoría Turismo Carretera, resultando muy exitoso por cierto.
LÍNEA SOBRIA, AERODINÁMICA
Siendo que se trata de un automóvil de la década del setenta del siglo pasado, su línea es sobria, aerodinámica, deportiva por otra parte, como ya quedó expresado. Si bien no es un “Charger”, con el cual tiene grandes diferencias, por estas tierras suele ser asociado al “General Lee” de los Dukes de Hazzard, en especial por el color naranja que similar al del auto de la serie y el hecho de ser cupé de dos puertas. Largo, asimismo ancho, con un amplio parabrisas, angosta y ancha parrilla frontal, faros rectangulares en los extremos, gruesos paragolpes con dos uñas verticales.
El confortable interior muestra un atractivo tablero, dos butacas delanteras, caja de cambios con palanca al piso y atrás un asiento enterizo. El tapizado y moquette fue reconstruido a nuevo en un trabajo de gran calidad. Un excelente auto y además notablemente presentado.
MOTOR
Como decíamos, el motor es el original, pero que fue completamente reparado con materiales modernos de alto desempeño, para darle más bríos a esta hermosa naranja mecánica.
Se trata de un V8 de 318 pulgadas cúbicas (5.2 litros), que originalmente erogaba 230 hp, con una relativamente baja relación de compresión que contemplaba los combustibles de mala calidad que se conseguían en la región por aquellas épocas. Ahora tiene ciertas mejoras que seguramente agrega varias decenas de equinos bajo el capó, entre ellas un árbol de levas Mopar Performance, admisión y carburador Edelbrock que “respira” 650 pies cúbicos por minuto, y encendido electrónico multichispa MSD.