Llanes: cien por ciento tenis

La actuación en un partido de la Copa Davis ante Venezuela, hace dos semanas en el Carrasco Lawn Tennis (CLT), colocó bajo las luces al tenista sanducero Francisco Llanes, que empezó a ser conocido a nivel nacional y buscado para entrevistas y notas. Con 16 años recién cumplidos, se dedica de lleno al tenis –sin descuidar el liceo– y se apunta como una de las mejores promesas de este deporte en el país.
“He tenido bastante entrevistas y ya se me fueron un poco los nervios a la hora de hablar. Me considero un tipo algo cerrado, me costó pero no queda otra. Además, tenés que hacerte conocer por el tema de los sponsors”, reconoció Llanes a EL TELEGRAFO en un mano a mano en el Complejo Irene Sosa, adonde llegó el tenista para compartir un rato con los chicos que integran la escuelita de esa institución que dirige Jorge Preve.
“Toto”, como todos le dicen, pasó por el Club Remeros, Paysandú Golf Club –fue entrenado por Paulo Melgarejo y Andrés Artía, respectivamente– y ahora forma parte de CLT, bajo la dirección técnica de Enrique Pérez Cassarino, quien a su vez es el capitán de Uruguay en la Copa Davis. Ha ganado títulos a nivel sudamericano y logrado medallas en los Juegos Odesur, y el mes que viene irá a Brasil para disputar tres Futures –que ya brindan puntos para el ranking ATP– y en junio hará una gira por Europa.
Los entrenamientos en Montevideo van de lunes a sábado: arranca a las 10 y por dos horas, hasta las 12, hace “solo tenis”, mano a mano con algún compañero y con el entrenador. Almuerza en el club y a las 15 otra vez a la pista para practicar aspectos técnicos para corregir gestos y golpes. Así, dos horas más. Y desde las 17 hasta las 19, físico. Los sábados baja en algo la carga, al tener dos horas de tenis y dos horas de físico.
“Se hace un poco de todo. Mucho trabajo aeróbico y en la parte musculación no podés cargar mucho, hay que distribuir bien los tiempos, va todo a medida. Es un deporte que quemás mucho, no es compatible mucha musculación porque te jode un poco la técnica”, detalla el sanducero. En estos momentos, junto a su compañero de entrenamiento, Franco Roncadelli, se encuentra en Buenos Aires para no perder roce internacional. “Estamos buscando torneos afuera para no quedarnos mucho tiempo parado en el mismo lugar; jugar contra otros jugadores o conversar con otros entrenadores que pueden ver más detalles para corregir. Se busca ir cambiando, ver cosas nuevas. La competencia siempre tiene que estar”.
Una vez a la semana, los jueves, asiste a una hora de terapia con una psicóloga de CLT, que el club pone a disposición de sus deportistas. “Toto” está muy conforme con este aspecto, que le sirve para fortalecer la mentalidad. “La parte psicológica llevada a tenis capaz la tratás mucho más con el entrenador, pero lo otro te puede ayudar en un montón de cosas fuera del tenis”.
UNA ELECCIÓN Y LOS ESTUDIOS
De niño, Llanes hacía cuatro deportes: natación, tenis, básquetbol y fútbol. La disciplina más popular del país la practicaba en La Gambeta, algo que le “encantaba”, “más que nada por el ambiente, tenía muchos amigos ahí”. “Pero llega un punto que te quedás corto de tiempo y tenés que elegir. Y quedó solo el tenis”.
En medio de esa intensa agenda de entrenamientos, el sanducero no pierde de vista los estudios. De ese modo, realiza quinto año de Humanística en el Colegio Nuestra Señora del Huerto, pero a distancia, por Internet. “Me suben trabajos a una plataforma, y por la computadora recibo los trabajos y después los tengo que mandar. Es una ayuda grande, me dieron esa posibilidad que me sirve mucho para aprovechar los tiempos libres y no abandonar los estudios”, relata “Toto”.
Su idea es finalizar el liceo y una vez concretado ese objetivo, analizar cómo viene su carrera tenística. Porque su cabeza está en desarrollarse en este deporte. “Obvio que sí. Ahora estoy encaminado y motivado, pero una lesión siempre puede estar en la vuelta, puede pasar cualquier cosa y es bueno tener el estudio”, reflexiona con sensatez.