La gloria celeste tiene forma ovalada

MONTEVIDEO (Por Pedro Dutour, enviado especial). El rugby de Uruguay volverá a un Mundial, por segunda vez consecutiva y cuarta en la historia, luego de derrotar –una vez más– a Canadá por 32-31 en un casi repleto y entusiasta Estadio Charrúa. Fue un partido cargado de emoción, y en el que la visita estuvo buen rato arriba en el marcador, al punto que llevó a sacar una diferencia que lo colocaba en la Copa del Mundo de Japón 2019.
Los Teros reaccionaron y pudieron celebrar el triunfo por todo lo alto, a la vez que reafirmaron el éxito de la ida en Vancouver, donde ganaron por 38-29. Uruguay necesitaba la victoria, el empate o perder por menos de nueve para llegar al certamen nipón del año que viene, en el que se integrará al grupo de Australia, Gales, Georgia y Fiyi. Cumplió con creces.
Cuando Uruguay descontó y volvía a meterse en el Mundial, Canadá dominaba con amplitud el primer tiempo, con una durísima defensa, claro en el juego de manos y punzante en ofensiva. Los celestes perdieron rápidamente la paciencia y cometieron errores, como algunos penales que pagaron caro y fallas en el line. Además, jugó al borde con posesión de pelota demasiado sobre su line goal.
A los tres minutos, Felipe Berchesi probó a los palos sin suerte. Sí la tuvo el canadiense Brock Staller: su penal valieron los primeros tres puntos. A los 11, Canadá aumentó de la mano de un try de Van der Merw contra la bandera, sin conversión. Poco más tarde, otro try de Taylor Paris –tampoco sin conversión– que llevó zozobra al Estadio Charrúa. La visita ganaba 15-0 y remontaba la diferencia de Vancouver.
Hasta que llegó la equivocación canadiense que le permitió a Uruguay volver a meterse en el encuentro: un line mal ejecutado, largo, recuperado por el capitán Gaminara, culminó con un try muy celebrado por parte de Ignacio Dotti a los 32 minutos (con conversión). Uruguay siguió achicando con penal de Berchesi pero Canadá cerró la primera mitad 18-10 arriba gracias también a un penal.
Tras el descanso, Uruguay recuperó el protagonismo y se enfocó definitivamente en la victoria: ya a los dos minutos del complemento, Juan Manuel Cat apoyaba un nuevo try. Sin conversión y a solo tres unidades del rival. Siguieron sendos penales para cada equipo que, a los 55 minutos, tenía el marcador en 21-18 para Canadá.
Si los nervios habían hecho mella en los celestes al principio del cotejo, los canadienses se envolvieron en ellos. Dos tremendos errores posibilitaron dos tries de Andrés Vilaseca, que no dudó en aceptar el regalo y que ubicaron a los celestes por primera vez arriba en el score. En ambos hubo conversiones por parte de Berchesi, mientras que en el medio se registró un try de maul de Canadá. Faltaban seis minutos y estaban 32-26 a favor del local.
El empuje del Charrúa y el temple de los dirigidos por Esteban Menseses abrocharon la clasificación, más allá del try en la hora del canadiense Van der Merwe. Resultado final: 32-31. De infarto.
Se trató de una nueva sonrisa desde el arribo del argentino Meneses en 2015. Luego de unas primeras duras derrotas, Uruguay se afianzó con él como head coach, con la conquista del Nations Cup y el tercer lugar en la Americas Rugby Championship el año pasado. Y a todo esto, encadena 12 test matches sin perder. Un gran momento de Los Teros.
Así jugaron
Uruguay: Mateo Sanguinetti, Germán Kessler, Mario Sagario, Ignacio Dotti, Rodrigo Capó, Juan Manuel Gaminara (capitán), Franco Lamanna, Alejandro Nieto, Santiago Arata, Felipe Berchesi, Nicolás Freitas, Andrés Vilaseca, Juan Manuel Cat, Leandro Leivas y Rodrigo Silva.
Suplentes: Carlos Pombo, Matías Benítez, Juan Echeverría, Manuel Leindekar, Rodolfo Garese, Agustín Ormaechea, Gastón Mieres y Joaquín Prada.
Canadá: Hubert Buydens, Ray Barkwill, Jacke Ilnicki, Brett Beukeboom, Josh Larsen, Evan Olmstead, Matt Heaton, Tyler Ardron, Phil Mack (capitán), Shane O’Leary, DTH van der Merwe, Nick Blevins, Ben LeSage, Taylor Paris y Brock Staller.