Samara se perfila para alojar a los celestes

Una vez conocidos los rivales y las ciudades en las que jugará Uruguay, llegó el momento de la planificación y de buscar el lugar de concentración y preparación del plantel. El sorteo del viernes que determinó los grupos del Mundial de Rusia del año próximo, colocó a los celestes en la serie con el local, Egipto y Arabia Saudita. La delegación uruguaya, que partió el martes pasado a suelo ruso, se decantará por Samara, una ciudad ubicada al suroeste del país, de más de un millón de habitantes, y que albergará el choque entre Uruguay y Rusia.
La comitiva celeste, que estuvo presente en la ceremonia en Moscú, fue integrada por los neutrales Edgar Welker, Roberto Pastoriza, Alejandro Balbi, el gerente deportivo Eduardo Belza y los miembros del cuerpo técnico José Herrera, Celso Otero y Mario Rebollo. En la capital rusa también dijo presenta el presidente de la AUF, Wilmar Valdez, en nombre del Consejo de la FIFA.
Samara, la sexta urbe más poblada de la nación y fundada a orillas del río Volga, se encuentra en una zona central respecto a las otras ciudades sedes. En la inmensa Rusia acortar distancias y ganar tiempo resulta clave. Además, en Samara la infraestructura está al alcance de la selección uruguaya.
A su vez, Samara se distancia a unos 950 kilómetros de Ekaterimburgo, a poco más de una hora en avión de la sede del primer partido donde Uruguay jugará el 15 de junio ante Egipto, y a casi la misma distancia de Rostov (1.093 kilómetros) donde el 20 de junio se medirá con Arabia Saudita. Los traslados entre las sedes son realizados en vuelos chárter contratados por la FIFA.
Pastoriza, dirigente de la AUF, confirmó a Referí que la delegación de Uruguay visitará tres ciudades y que en las próximas horas definirán el lugar de concentración, pero la prioridad la tiene un complejo de Samara.
Otra alternativa que maneja Uruguay, son las instalaciones del Spartak de Moscú. Aquí se tendría en cuenta la conectividad. Desde la capital rusa hay vuelos hacia todos lados y queda en un lugar geográfico estratégico.
YA ARRANCÓ
En tanto, el segundo técnico de la selección uruguaya, Celso Otero, se mostró feliz por jugar contra el anfitrión del Mundial, Rusia, aunque lamentó no tener la oportunidad de disputar el partido inaugural.
“Nuestro grupo tiene la particularidad de tener al anfitrión y eso tiene un ámbito de repercusión mayor y nos beneficia”, declaró Otero, que asistió al sorteo por la ausencia de Oscar Tabárez. Otero destacó como máximos rivales a Rusia, por “su condición de anfitrión y (equipo) europeo” y a Egipto, “que clasificó en África, un continente muy difícil”.
“Nuestro trabajo ya comienza para el Mundial, buscando la sede y después ya empezaremos a estudiar a los rivales”, añadió Otero.
De superar la primera fase, Uruguay podría cruzarse en octavos contra España o Portugal, los dos favoritos del Grupo B. “Ambos son muy fuertes, pero nosotros tenemos que pensar primero en los tres primeros rivales”, zanjó.