Quebracho vivió intensa audiencia pública; también recibió menos

Con activa participación de vecinos se realizó anoche la sexta audiencia pública de los municipios de Paysandú en Quebracho, donde el año pasado no se había realizado. Únicamente queda ahora la del municipio de Piedras Coloradas. La audiencia fue presidida por el alcalde Mario Bandera y entre los presentes estaban los alcaldes de Chapicuy, Ángel Eduardo Ceballos, y de Lorenzo Geyres, Graciela Barrute.
A diferencia de lo ocurrido en los otros municipios, en Quebracho los vecinos participaron activamente, realizando preguntas que dejaron de manifiesto que el Concejo tiene algunas deficiencias de funcionamiento (exposición pública no actualizada de las actas de sesiones; pocas sesiones en el año; falta de un Orden del Día en las sesiones) pero también que hay vecinos que decididamente no están de acuerdo con su gestión aun cuando las decisiones tomadas se ajustan a lo que habitualmente se hace en la Administración pública.
Varios participantes recordaron que hay obras sin concretar, como en plaza Artigas y en el Parque Municipal, y que en cambio se hizo una ciclovía. La respuesta expuso la falta de técnicos a disposición de los municipios y que recientemente llegó una arquitecta de la Intendencia de Paysandú para comenzar a trabajar en el diseño de proyectos. Por otra parte, se indicó que la ciclovía fue hecha de manera rudimentaria, aprovechando los conocimientos que se tiene en caminería rural. De hecho, su superficie es de áridos compactados y carece de iluminación pública. Las preguntas se fueron repitiendo, girando en torno a los mismos temas hasta que terminaron en el problema de “la casa de Raquel”, que de acuerdo a quien hacía uso de la palabra hace años sufre inundaciones repentinas en fuertes lluvias. Desde el Concejo se contestó que se había trabajado en el tema y que la vecina se había mostrado satisfecha con la solución concretada. “Si de nuevo tiene problemas no lo sabemos, realmente”, dijo una concejal. A lo que remató el exponente, a lo Zapata, con un “no se inunda porque no llueve”, provocando la risa general.

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