Forlán apuntó contra los dirigentes

Diego Forlán estuvo a punto de volver a vestir la camiseta de Peñarol y, cuando las negociaciones parecían avanzadas, la firma se cayó. Se esgrimió las diferencias en torno al salario como causa para que no se concretara el deseo del propio jugador, del presidente de Peñarol, Jorge Barrera, y del plantel aurinegro que acaba de salir campeón uruguayo. Pero Forlán, en una entrevista ayer con el programa radial A Fondo de 1010AM, comentó que hubo otros motivos.
En la audición, el mejor jugador del Mundial de Sudáfrica 2010 explicó cómo resultó ser la reunión entre los dirigentes del club y su hermano, Pablo, para intentar que retornara al club. De acuerdo al futbolista, todo se refirió a “un tema político”. “No me querían, fue un manejo para ensuciar la imagen del presidente (Jorge Barrera). Me utilizaron a mí, no la vi venir y quedé expuesto”.
“Mi error fue haberme puesto a disposición de ellos, porque cambiaron los lugares, pero las caras, las personas y personajes son los mismos que se criticaban hace un mes atrás; si no que se pongan en una lista única y trabajen por Peñarol”, continuó.
“Terminé siendo el villano en una situación que no provoqué. Desestimé ofertas por la situación de Peñarol, que era algo que estaba cerrado para mi, pero me llamó Leo (Ramos, el DT carbonero), los compañeros y Jorge (Barrera) para volver y lo quería hacer, tomé la decisión de querer hacerlo, pero después de la nada se originó una situación inentendible que no provoqué”.
Forlán manifestó que en un encuentro con su hermano, éste le contó que tenía miedo que el origen de todo el asunto esté relacionado a un manejo político. “Le digo que no creo que pase porque habían pasado las elecciones y el presidente está electo. Cuando se pacta la reunión, Jorge comete un error por querer hacer una política inclusiva diferente a la de Juan Pedro (Damiani) e incluye a los demás dirigentes a formar parte del manejo de los contratos”.
Cuando Pablo Forlán “se reúne con los dirigentes, éstos le hacen una oferta y ve que la teoría que él tenía le da la razón. Se da cuenta de que no me querían a mi, que era un problema político. Después me entero que había varios personajes de esa reunión que dijeron que a Forlán no lo quieren en Peñarol”.
En la charla con A Fondo, el jugador dijo que con su hermano habían diseñado una estrategia de marketing para que su contrato no le costara nada al club. “Nos habíamos reunido con mi hermano para manejar una estrategia de marketing para que Peñarol no tenga que poner nada, porque sé lo que está pasando y hace meses que le deben a la mayoría del plantel, al técnico, a todos. Entendía la situación del club y lo que menos quería era crear un problema más”.