La receta: contragolpe, Morales y gol

Sí: 18 de Julio y una receta ya conocida pero no menos valedera. La del contragolpe o el pelotazo largo para Matías Morales, definición perfecta y goles. Así le ganó a Progreso un partido que generalmente en su tránsito fue parejo, hasta con un mejor segundo tiempo de los azulgranas, que llegaron a generar algo más de fútbol en medio terreno, más allá de que a lo largo del choque primaron los pelotazos, jugándose por momentos por arriba y sin darle destino cierto al balón.
Los dos con procedimientos tácticos similares, con defensas firmes, expeditivas, volantes que ayer tuvieron poca creación, incluso Patritti a quien por momentos le costó poder tomar contacto con la pelota para armar la ofensiva.
Así la pelota pasaba rápido de un campo a otro, lo que dejaba a los puntas de ambos ataques sin recibir adecuadamente la pelota. Una situación de riesgo para cada arco: un cabezazo de Dos Santos que fue a buscar al área de enfrente y la pelota se fue arriba, y del otro lado Rossi estuvo cerca de anotar.
Llegando al final del primer tiempo sale una pelota larga, Matías Morales le gana en el pique a los centrales rivales, el arquero se queda sin salir al achique y el delantero se tira a un costado y resuelve poniendo la pelota por arriba para decretar la apertura.
El segundo tiempo marcó una mayor intensidad. En Progreso hubo variantes de hombres y posicionales, se juntaron más los volantes con los puntas, llegó más, pero fue demasiado con pelotas áereas, que permitieron que el experiente Torres bajara infinidad de centros. Y, además, el fondo de 18 de Julio fue conjurando otras oportunidades, aunque perdiera por expulsión a Dos Santos.
En eso estaban cuando otra vez partió una pelota larga, Matías Morales vuelve a superar a los marcadores y no tiene problemas para anotar el segundo y lapidario gol. Así 18 de Julio, jugando un segundo tiempo esperando y reeditando el arma del contragolpe, se quedó con merecida victoria ante equipo que trajinó en el campo pero que no pudo romper el cero en el arco rival. “Chapatín”