Las demandas penales de ALUR S.A. y del actual titular de la metalúrgica Urbicar S.A. por un posible caso de apropiación indebida o estafa –que figuraban en un mismo expediente– fueron archivadas ya que la fiscal Alicia Abreu, horas antes de ser trasladada a Colonia, desestimó las denuncias por no encontrar delitos en el accionar de quien cobró ese dinero, o de quien lo pagó.
Según dijo a EL TELEGRAFO el Juez Fabricio Cidade –que mañana se traslada como juez a San José–reconoció que el caso se había archivado a solicitud de la fiscal, ya que no iba a hacer ninguna acusación, y que él no tiene poder para cambiar esa situación. Pese a esto, Cidade dejó sentado en el decreto que dispuso el archivo que no comparte las conclusiones a las que llegó la Fiscal.
En los hechos, el caso terminó judicialmente pese a que –como figura en el expediente, que tendría más de 600 hojas– estaría probado que el anterior dueño Gustavo Cesan cobró el dinero depositado por ALUR S.A. en una cuenta de otra empresa de la ciudad de Colonia –donde vive– y emitió un recibo oficial de la metalúrgica Urbicar en dólares, con fecha del mes siguiente a haber vendido la empresa.
Una fuente judicial señaló que “nadie fue responsable de ese error, ni quien lo pagó ni quien lo cobró”, aunque el actual titular de Urbicar, Álvaro Rodríguez, dijo a EL TELEGRAFO que hoy sus abogados estudiarán las medidas a tomar ante el archivo del caso, que podría ser una apelación. Ayer no se pudo confirmar qué acción tomará ALUR S.A., que se ve doblemente perjudicada, ya que con el archivo de la causa podría ser sujeto de acciones legales por haber echado a tres funcionarios responsables del mal pago. (Más información en edición impresa)