“Me críe con otra cultura sindical; este sindicato tiene otras reglas de juego”

El presidente de la Junta Departamental, Ricardo Ambroa, calificó de deshonesto el procedimiento del sindicato de trabajadores del órgano deliberativo, que anoche impidió la realización de la sesión ordinaria del cuerpo, y los acusó de pretender desplazarlo de sus potestades como presidente. El jerarca dijo a EL TELEGRAFO que los trabajadores realizan una “huelga atípica, donde ellos reducen las tareas entre un 30 y un 60 %” y se les han realizado descuentos en su remuneraciones ajustadas a este porcentaje.
“Hay antecedentes”, justificó Ambroa: “al Poder Judicial el año pasado se le descontó un 50%, a los inspectores de DGI el año pasado que no fueron a Punta del Este y la DGI entendió que perdió de recaudar un 40%, se les descontó un 40%”.
El presidente aseguró que la medida de paralizar la sesión de anoche no le fue comunicada con la antelación debida y no ocultó su molestia por la actitud del sindicato. Entre otras cosas, señaló que los trabajadores cambiaron la clave de una computadora que -conectada a la consola de sonido- permite registrar el audio de la sesión. “No comunicaron oficialmente que había paro. Si hay una medida gremial, si están de paro, lo tienen que comunicar, así yo obro en consecuencia; no puedo entrar a sala como entré a las 20 y me sacan la clave de la computadora, que eso es grave, eso es gravísimo. Yo voy a obrar en consecuencia, eso se va a pasar a (comisión de Asuntos) Internos”, adelantó.
La tirantez había comenzado en la sesión anterior. “El 7 de setiembre avisaron 15 minutos antes que no iban a entrar a la sesión. Les dije que no era necesario permanecer en los lugares de trabajo; ellos vinieron, marcaron a las 20 y estuvieron hasta las 12 allá arriba en su despacho, no haciendo nada de sus tareas habituales, hacen como que trabajan para que no les descuenten. Esa práctica en el movimiento sindical no existía”, dijo.
A raíz de eso se resolvió el descuento del 60 % de la remuneración correspondiente a ese día. “A mí me parece hasta deshonesto de ellos venir a marcar, hago como que trabajo, me quedo arriba en mi despacho y a mi actividad principal que es entrar a sala, no entro. Yo me críe con otra cultura sindical, este sindicato tiene otras reglas de juego”, planteó. (Más información en edición impresa).