Tiene razón la diputada

Con absoluta certeza podemos afirmar, como diario que somos, que la aseveración formulada en nuestras páginas el sábado pasado es estrictamente cierta. La noticia que tituláramos “Pedir recursos para el Florencio es para ‘la tapa del diario local’ dijo en Diputados Cecilia Bottino”… y ello es así pues sabemos que sin lugar a dudas un título que anuncia el otorgamiento de más recursos para el Teatro Florencio Sánchez competiría fuertemente con las barrabasadas de Sendic o los desmanes de Maduro para ser el título principal de primera página.
Esta afirmación nuestra es condicional porque si bien la doctora Cecilia Bottino se refiere a “el diario local”, más adelante en su argumentación sostiene que ella es “representante nacional” y dijo que estaba de acuerdo con “lo que decía el diputado (Oscar) de los Santos: ‘mirá si trajéramos al Parlamento cada uno de nosotros las demandas locales”. Si tomamos al pie de la letra esta afirmación, podríamos pensar que la “representante nacional” se podría haber referido a “Cambio” o “El Pueblo”, ambos de Salto, “Crónicas” o “Acción” de Mercedes, o “El Heraldo” de Florida” o muchos otros.
Si bien los hechos dan fe de que la doctora Bottino actúa guiándose por el comentario del diputado De los Santos ya que en lo que va del actual período legislativo únicamente ha presentado dos “mini” mociones de “tono sanducero” –una referida a la denominación de la Escuela Nº 57 de Paysandú y la otra a la elevación de Quebracho a la categoría de ciudad– convendría ver cuáles son los cometidos de los representantes nacionales.
Al respecto, la Constitución de la República establece: “Artículo 88.- La Cámara de Representantes se compondrá de noventa y nueve miembros elegidos directamente por el pueblo, con arreglo a un sistema de representación proporcional en el que se tomen en cuenta los votos emitidos a favor de cada lema en todo el país. No podrá efectuarse acumulación por sublemas, ni por identidad de listas de candidatos”.
Y destaca: “Corresponderán a cada Departamento, dos Representantes, por lo menos. El número de Representantes podrá ser modificado por la Ley la que requerirá para su sanción, dos tercios de votos del total de los componentes de cada Cámara”.
A su vez, en el Sitio Oficial de la Cámara de Diputados podemos leer: Integración del cuerpo Nómina de Representantes por Departamento, Paysandú Bottino, Cecilia; Olivera, Nicolás J.; Verri, Walter. Textualmente: Representante Nacional por el Lema Partido Frente Amplio, departamento de Paysandú cbottino@parlamento.gub.uy.-
Con todo esto, estaría meridianamente claro a quién se debe el escaño. Si la intención hubiese sido crear diputados “nacionales”, no existirían las listas departamentales: sería una gran bolsa de listas que se votarían en todo el país. Es muy preocupante que una diputada no tenga claro quién la votó, a quién representa y por qué está donde está, ocupando una banca y cobrando su jugoso sueldo.
Considerando pues lo expresado por la Constitución y el hecho de que el Teatro Florencio Sánchez es, sin dudas, un motivo de orgullo para Paysandú, sólo hay una conclusión posible: el “diario local” es EL TELEGRAFO, única publicación diaria local. Aclarado este punto, vayamos a lo que importa: “Los diputados Walter Verri y Nicolás Olivera promocionaron un aditivo en la Rendición de Cuentas con destino a la recuperación del teatro Florencio Sánchez. En tanto, la también diputada por Paysandú Cecilia Bottino argumentó que la idea era “una demanda con marketing” porque se trataría “de lo que puede sí salir en el diario local”.
“Ya puedo imaginarme cuál puede ser el titular del famoso diario local que todos ustedes conocen”, dijo y al finalizar su intervención, al indicar que “con responsabilidad esta legisladora argumenta en este sentido (en contra del aditivo) sin importarle lo que va a ser con seguridad mañana (por hoy sábado) la tapa del diario local”.
El aditivo pretendía ser incluido en la Sección IV, Inciso 11 del presupuesto del Ministerio de Educación y Cultura (MEC). Los diputados de la oposición -pidieron que se destine seis millones de pesos en 2018 y en 2019 (doce millones en total), así como otros 4 millones de pesos en 2018 “con destino al acondicionamiento, equipamiento y mantenimiento del teatro Florencio Sánchez de la ciudad de Paysandú”. “Vengo no solo con coraje, vengo con responsabilidad. La misma responsabilidad que se debe tener cuando se gobernó el departamento, cuando se ocuparon cargos de relevancia, cuando se fue director de Obras, cuando se tenía bajo su égida la posibilidad de solucionar los problemas de infraestructura que tiene el Florencio Sánchez, que no son de ahora”, agregó Bottino.
Luego explicó que “el 22 de junio el intendente Guillermo Caraballo, mi compañero, presentó a la Fundación de Amigos del Teatro Florencio Sánchez el plan de intervenciones con el objetivo de constituir a Paysandú –más allá del teatro– en un enclave cultural regional del litoral uruguayo y argentino”. Eso incluirá recuperar el antiguo cine Astor y transformar la biblioteca departamental. “Para eso se cuenta con los recursos departamentales y nacionales”, subrayó.
Quizás el hecho de que no aparezcan más títulos sobre el teatro sanducero le haga recordar a la diputada “nacional” el compromiso asumido cuando los tres diputados (¿por Paysandú?) acordaron trabajar en conjunto por la recuperación del coliseo local porque consecuencia de ese acuerdo fue, por ejemplo, la reunión con la ministra de Educación y Cultura, doctora María Julia Muñoz, conjuntamente con la Fundación de Amigos del Florencio Sánchez. Por lo menos en esa oportunidad quien representó a la diputada titular fue su primer suplente, Miguel Pitetta, y no aludió en ningún momento a la curiosa posición que se expresó en Cámara.
Curiosamente, porque ella no se ocupa de “demandas locales”, en sus declaraciones alude a lo informado por el Intendente Departamental a la “Fundación” y verdaderamente es así. No hay mejor prueba de ello que el hecho de que en estos momentos está cayendo el deteriorado cielorraso que será reemplazado junto a otras obras.
O la señora diputada no retuvo nada de lo que se ha planteado en las reuniones con la fundación, o no escuchó al doctor Caraballo –compañero de partido– sostener que falta mucho más; o nunca estuvo en el teatro; o, ingenuamente cree que con las obras actuales está todo solucionado.
En realidad, y siendo breves, falta dotar a la sala de aire acondicionado, caja escénica, equipamiento de imagen y sonido, las obras necesarias para poder habilitar las localidades de la parte superior y, luego, levantar el gran centro cultural que se pretende.
Todo eso se construye con mucha voluntad y muchísimos fondos. Fondos que sí votaron los representantes “nacionales” para el teatro El Galpón, o la sala Adela Reta del Sodre en Montevideo. Por eso los aportes del estado son imprescindibles. Por eso, doctora, hubiésemos “titulado” su voto con muchísima fuerza, si es que se refería a nosotros, claro.