Presentaron control biológico de garrapata con hongos patógenos

“Más que un control, es un manejo alternativo para el control de la garrapata, debido a que se extraen patógenos del parásito que se encuentra en los establecimientos”, señaló la ingeniera agrónoma Alda Rodríguez de Bío Uruguay, al presentar en una jornada promovida por el Instituto Plan Agropecuario y la Asociación Agropecuaria de Salto, denominada “El control biológico de garrapata con hongos patógenos”.
Explicó que “se los extrae (a los patógenos) de los ecosistemas naturales y se los reproduce para volver a insertarlos en el sistema y que ayuden a controlar la garrapata”, dijo la profesional a diario Cambio.
El trabajo ya se realiza en algunos predios, como el establecimiento Botocatú en Salto, logrando disminuir el uso de agroquímicos. En este predio se utilizan para el control de la garrapata cada veinte días, en baños de inversión y en vacas con destino a faena.
Según la profesional, es una “alternativa que tiene que ir poco a poco desarrollándose en el país, porque estamos atrás en esto de utilizar nuestra biodiversidad natural para el control de plagas”.
Sostuvo que otros países lo tienen desarrollado, como es el caso de Brasil, Colombia, México y Cuba, “donde hace años que usan control biológico y reguladores naturales de la garrapata; nosotros, con Uruguay Natural, todavía tenemos la chance de poder aislarlos”.
Rodríguez manifestó que en este momento se trabaja en nuestro país “con 12 productores diferentes y con una cooperativa de productores lecheros de Tacuarembó, donde se han ido separando los hongos de los géneros Lecamisinun, Bauberia y Metarrisium, que son los que más se presentan como patógenos de la garrapata”.
Estás variedades de hongos son fáciles de encontrar en los campos del norte del país, en suelos de basalto, según la profesional, que recordó el ejemplo del establecimiento Botocatú.
Para encontrar estas especies en los campos de nuestro país, “depende de su manejo, el hecho de conservar las pasturas naturales, de controlar el sobrepastoreo para que no degraden el suelo”. En aquellos predios donde no se tienen estos cuidados con el suelo o se utilizan indiscriminadamente los agroquímicos, “es muy difícil encontrar estos patógenos”, indicó Rodríguez.
La utilización de estos patógenos para el control de la garrapata se realiza a través de los baños de inversión o de aspersión. El servicio que realiza Bío Uruguay es tratar de aislar los patógenos a través de envíos de garrapatas y de tierra del predio del productor y, de esta manera, los patógenos aislados están de acuerdo con el establecimiento. Estas variedades de hongos tienen dos etapas: la primera es “patogénica” y la siguiente es “saprofítica”, es decir, “cuando están invadiendo una garrapata viva, son patogénicos hasta que la matan, después se desarrollan hacia afuera en una etapa saprofítica, cuando vuelve a esporular y vuelve a dar muchas fuentes de inóculos para enfermar muchas garrapatas más. Esta etapa es la que nos permite reproducirlos en sustratos alternativos”.
El producto elaborado posteriormente “se diluye en agua para suspender las esporas y ya sea en baños de inmersión o de aspersión, hacer pasar el ganado por las esporas”.
La profesional explicó que “son organismos que están presentes en nuestros ecosistemas y que no generan residuos en la carne y no afectan a animales de sangre caliente ni al humano. En el cuerpo de la vaca se mueren porque no soportan temperaturas por encima de los 35 grados y solamente actúan si la espora entra en contacto con la garrapata”.
Con respecto al costo para el productor, explicó que, según los cálculos realizados por la empresa, en el caso de que se deba reproducir estos organismos, es de alrededor de $5 por animal, por baño. “En el caso de los lecheros, lo hacen ellos mismos, nosotros hacemos el servicio de refrescamiento, porque no se pueden reproducir eternamente en medios alternativos porque pierden su virulencia. Cada tanto hay que volver a pasarlos por la garrapata, en este caso, los costos son su mano de obra, algún kilo de arroz y algunas bolsas de propileno”.
CONTROL EN AGOSTO
Participó también de la actividad el doctor Rafael Carriquiry, quien recordó que se debe realizar a partir de este mes el control de la garrapata a todos los vacunos en el establecimiento para lograr un control del parásito de forma temprana.
En su exposición, se refirió a una herramienta como es la hemovacuna, “que es de altísima eficacia y excelente relación costo/beneficio, y que tiene una historia de uso de muchos años en Uruguay”.
“No me canso de repetir que es inaceptable tener mortandad de vacunos por tristeza con el nivel de conocimiento que tenemos hoy y con esta herramienta que disponemos, como es la vacuna, con altísimo resultado”, subrayó.