SALTO (Por Daniel Hardy Coll). “Estamos en contra del fracking, también la Junta Departamental, hay una enorme preocupación con estas perforaciones ante el peligro de afectar la mayor reserva de agua dulce del continente, como es el acuífero Guaraní y nos alineamos en ese sentido con ustedes, por lo que necesitamos las resoluciones y estudios que emanen de este evento”, afirmó el intendente municipal de Salto, Andrés Lima, al abrir el primer Foro Regional “Cuidemos el agua del acuífero Guaraní, que es de todos”, organizado por la Asociación Civil Ambientalista de Salto (ACAS) “Salteños en Defensa de los Bienes Naturales”.
El foro de debate que se llevó a cabo en la sede municipal a orillas del río Uruguay, este sábado, arrojó importantes resultados para aclarar la actividad petrolera que ejecuta en territorio uruguayo Schuepbach Energy Uruguay (SEU), que es un operador (desembarcó en Montevideo el CEO de la firma, Martín Schuepbach, en 2007) de Petrel Energy Limited de Australia.
La inquietud de los movimientos ambientalistas de todo el país y de la provincia argentina de Entre Ríos –donde ya está prohibido el fracking– comenzó a visibilizarse con rigor el sábado 5 pasado, al marchar centenares de personas hacia Cerro Padilla en la Cuchilla de Fuego, a 154 kilómetros de Paysandú capital, tal como informó EL TELEGRAFO.
El Foro de Salto se pronunció en contra del fracking, de que la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) continúe permitiendo perforar y explorar, mientras se solicitan oficialmente reuniones con los delegados de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) y de la CTM de Salto Grande; además no descartan nuevas movilizaciones como la concretada en Cerro Padilla. Preocupa a los ambientalistas cómo y dónde se depositan los lodos, la potencial utilización de productos químicos en estos pozos y toda actividad originada por Schuepbach que ponga en riesgo la vida natural del acuífero Guaraní.
La semana pasada, el gobierno anunció en una comisión parlamentaria que está dispuesto, estudio mediante, a presentar un proyecto de ley que exigiría una moratoria para el empleo del fracking sobre el acuífero Guaraní por cuatro años. El proyecto fue elevado por el diputado sanducero Walter Verri, pero que tiempo atrás redactó el senador Pedro Bordaberry.
Para las asambleas ambientalistas de ambas orillas del río Uruguay, el proyecto es interesante, pero solo si en el último artículo se incluye “prohibición” en lugar de “moratoria”. Verri señaló a EL TELEGRAFO el 2 de julio que: “el gobierno está dispuesto a votar nuestro proyecto para establecer una moratoria al uso de la técnica de fracking” y en el Consejo de Ministros, realizado en Piedras Coloradas, en febrero de 2016, el presidente Tabaré Vázquez anunció que: “el fracking no está en ninguno de los planes futuros de nuestro gobierno, ¿queda claro?, no va a haber fracking en Uruguay”. Lo mismo le contestó el director de la Dinama al diputado de Unidad Popular, E. Rubio, como informó el diario en su edición del 17 de mayo.
ACAS señaló que las consecuencias conocidas y certificadas de esta técnica –que ya está prohibida en Alemania, Francia y Bulgaria– son varias, pero sobre el acuífero Guaraní podrían ser “catastróficas”. Entre ellas, mencionan el alto riesgo de contaminación con hidrocarburos, ya que el agua puede mezclarse con químicos de alta peligrosidad, conocidos como lodo de perforación, agregándole metales pesados y elementos radioactivos, cancerígenos y mutagénicos; potencialmente puede causar movimientos sísmicos provocando daños irreversibles en la naturaleza estructural de las rocas; y aumentan las emisiones de gases de efecto invernadero afectando la agricultura, la ganadería y el turismo.
En tanto, Schuepbach Energy Uruguay sigue avanzando en la prospección de hidrocarburos, aunque hasta ahora ha descartado la técnica de fracking. Este año quiere terminar de abrir cuatro pozos convencionales de los veinte que tiene en carpeta: Cerro Padilla, Cuchilla de Pampa en Tacuarembó, Cerro de Chagas, en las inmediaciones de Laureles en Salto por ruta 31 y en Cañada Fea, en la localidad de Palomas, por ruta 3 frente a Constitución y a 20 kilómetros lineales de la represa binacional de Salto Grande. (Más información en edición impresa)
