Solicitada

CUANDO TE SACAN LAS  GANAS DE VIVIR EN URUGUAY…
Quiero compartir una experiencia frustrante con el solo objetivo de aportar a romper paradigmas, a romper con inercias, y a generar una instancia de cuestionamiento que nos permita mejorar el confort.
El 15 de mayo un inspector de OSE fue por nuestra casa a alertarnos de una posible pérdida debido a que el consumo del mes era de 188m3, cuando en promedio rondamos los 15m3 mensuales, y nos recomendó una empresa especializada en la detección de pérdidas invisibles. Recorriendo la casa no había evidencias de pérdida de agua en ningún sitio. Inmediatamente comenzamos a cerrar la llave de paso para evitar más pérdidas y ese mismo 15 de mayo contactamos a la empresa especializada para que inspeccionara la casa y detectara la pérdida. Tuvieron que inspeccionar la casa en tres días, y romper en varios lados hasta poder detectar que la pérdida era en un caño enterrado ubicado próximo a una cámara, lo cual favorecía que el agua drenara sin ser vista. La pérdida se reparó inmediatamente. Se comunicó a OSE y el inspector visitó nuevamente la casa y verificó la reparación y la ubicación de la pérdida. Una vez reparado me comunicaron que esperara el nuevo recibo y que fuera a solicitar bonificación por el consumo, para que la factura no fuera tan elevada, dado que era una pérdida invisible, y que había sido reparada rápidamente. Antes de recibir el recibo envié una nota al gerente de OSE en Paysandú, el día 26 de mayo, comunicando la situación y argumentando que en los 22 años que personalmente soy cliente de OSE nunca se pagó una factura después de fecha, y que la evaluación de consumo histórica era una clara muestra del uso eficiente del agua por mi núcleo familiar, sin picos de consumo, y con reparación inmediata de pérdidas visibles (reparación de canillas, cisterna, etcétera). A su vez, se argumentó el rápido accionar que tuvimos ante la visita del inspector, llamando inmediatamente a la empresa recomendada por el inspector, y reparando en el menor plazo posible la pérdida. No hubo respuesta de gerencia.
Nos acaba de llegar la factura y el monto a pagar es $60.000, cuando normalmente tenemos un consumo histórico de $500-700. Cien veces más. Al ir a la Oficina Comercial, nos hacen una bonificación del 50%, o sea que adeudamos $30.000, por una pérdida que no pudimos ver, que una empresa especializada demoró tres días en encontrar, un cliente buen pagador, buen cuidador del recurso, y de actitud responsable ante pérdidas.
El argumento es que el sistema no admite bonificaciones mayores al 50% (como si el sistema tuviera vida propia y nos gobernara).
Hay varios puntos frustrantes:
–Dentro de esos $30.000, el 50% corresponde a alcantarillado variable, no al consumo de agua per se. No se considera que el uso desproporcionado de las tuberías fue involuntario y accidental. No evitable.
— El 50% de bonificación aplica tanto para alguien que tuvo una pérdida incontrolable y corregida de urgencia, de 5m3 como de 500m3.
— Nos plantearon la posibilidad de firmar un convenio, a pagar en 36 meses… con $3.500 de intereses totales, casi 12% de la deuda… con un costo mensual que duplica nuestra factura mensual, y que se deberá sumar a la factura mensual normal. O sea que por 36 meses se tendría una factura 3 veces más alta que el consumo promedio.
— OSE determina que la responsabilidad es 100% del usuario porque la rotura fue del contador hacia dentro de la casa. No asume ninguna responsabilidad en la regulación de la presión con que nos envía el agua.
— Entiendo que se busque transparencia al exigir que los contadores estén fuera de la vivienda, pero debemos compartir riesgos. Yo antes tenía el contador al ingreso de mi casa, y casi que sin querer lo veía al entrar. Hoy está enterrado en la vereda con limitadas posibilidades de ser controlado por el usuario.
En la nota enviada a la gerencia además de un reclamo se realizó una propuesta: estudiar la posibilidad de instalar contadores inteligentes, que permitan topear el consumo mensual. En nuestro caso si lo topeáramos en 20 m3, podríamos detectar la ocurrencia de pérdidas invisibles al ver que nos quedamos sin agua antes del mes. No sé si es posible, pero dudo que sea imposible. Estoy convencido que nos protegería mucho a los usuarios, pero también sé que limita la capacidad de recaudación de OSE.
Durante las distintas instancias que tuve que ir a la oficina comercial por este problema, fueron numerosos los casos de reclamos por pérdidas invisibles. Considero que OSE, al ser del Estado, y monopólica, debería cuidar el bienestar de la sociedad, y que no sea un ente más de recaudación.
Este tipo de actitud de ignorancia por parte del gerente e indisposición a cambiar lo que no funciona bien, siempre con esa doble moral de no reducir la recaudación, nos van sacando día a día las ganas de vivir en nuestro querido Uruguay… Carlos A. Pérez